No se supone que alguien joven, bueno, les recuerdo que tengo 23 años, hable de estos temas a menos que tenga una enfermedad crónico-degenerativa o bien haya pasado por una experiencia extrema como un accidente en la que casi se pierde la vida, pero aquí va otro espero que les guste:
Muerte, conmigo no cuentes.
Las canciones son las mismas, las palabras no tanto, pero una cosa si te digo, querida muerte de sitio, que conmigo no cuentes.
Hay mucho tiempo que disfrutar, hay mucho amor quedar, hay muchas palabras todavía por decir, nada a alcanzado un reflejo de lo que llamamos vida.
Por eso cuando me vaya a dormir, muerte una cosa sí te digo, que conmigo no cuentes.
El desayuno está por empezar, por qué arruinarlo con un mal pensamiento; aqui vienes chiquilla tratando de jugar, por qué arruinarlo con un mal momento.
Por eso cuando me vaya a trabajar, muerte una cosa sí te digo, que conmigo no cuentes.
La fiesta ya va a empezar, los invitados se paran a bailar, un destino diferente a partir de este punto nos tiene que llegar, ¿por qué lo vamos a parar abruptamente?
Muerte, muerte eterna, una cosa sí te digo, conmigo no cuentes para apagar las luces cuando apenas sale el sol.
La inspiración, bueno, es un escrito que salió pues esto de la muerte es algo que me ha estado ocupando reflexión desde hace mucho,y conincidió con que tanto Paul McCartney como Aleks Synteks en sus nuevos álbumes dedicaron un tema a esto y me dije, ¿Por qué no? y el resultado fue mi propia visión, a los 23 años, de la muerte, y de aquello que no quiero dejar de hacer, por cierto mi querida Yaz, éste si es actual. Nos vemos en la que sigue
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